Cómo crear el hábito de hacer ejercicio

(sin depender de la fuerza de voluntad)

Cómo crear el hábito de hacer ejercicio.

Todo el mundo sabe que la actividad física tiene muchísimos beneficios.

Pero no todo el mundo es capaz de mantenerse constante con ese hábito.

Vamos a ver cómo hacer que la actividad física forme parte de nuestra vida sin depender exclusivamente de nuestra fuerza de voluntad.

 

1. Ser conscientes de todos los beneficios:

Parece una tontería. Pero tenemos que ser conscientes de todos los beneficios que tiene el ejercicio.

No solo a nivel estético, si no también a nivel de salud metabólica, cardiovascular, articular y básicamente todos los sistemas de nuestro organismo se benefician de la actividad física.

Y no solo eso, si no que también obtendremos beneficios a nivel mental. Dándonos más claridad, mayores niveles de energía y en definitiva nos permitirá disfrutar más de la vida.

 

2. Ser conscientes de las consecuencias de no hacerla:

Si no realizamos actividad física diaria no tendremos los beneficios que hemos comentado, pero además adquiriremos mucho riesgo para desarrollar patologías como la obesidad, enfermedades cardiovasculares o metabólicas.

Sencillamente a la larga gozaremos de peor salud y envejeceremos antes, disminuyendo nuestra calidad de vida de manera significativa.

 

3. Encontrar nuestro “para qué” hacer actividad física:

En vez de ponernos a hacer la actividad física que nos recomienda el médico como el pilates o la natación, creo que es importante saber “para qué” hacemos dicha actividad física.

Puede ser para sentirnos más ágiles, para poder jugar con nuestros hijos o nietos, o sencillamente por un objetivo estético.

Cuánto más potencia emocional tenga ese “para qué” más probable será que nos mantengamos constantes.

4. Buscar la modalidad de ejercicio que disfrutemos:

La otra parte de empezar a hacer actividad física es hacer la actividad física que disfrutemos.

Hacer lo que está de moda o la recomendación de un profesional sanitario puede que no se ajuste a nuestras preferencias respecto a la actividad física.

Es importante plantearnos si queremos una actividad al aire libre o en interior. Si preferimos hacerla solos o acompañados.

La actividad física “perfecta” es aquella que vamos a poder hacer todos los días sin utilizar una excesiva fuerza de voluntad.

 

5. Hacer ese ejercicio con algún ser querido:

Aunque hayamos decidido que queremos realizar una actividad física solos, sería bueno valorar si no podríamos hacerlo con una persona que sea cercana a nosotros.

Esto es simplemente por el hecho de que cuando uno quiera flaquear y no realizar dicha actividad física, la otra persona tirará de ti, y viceversa.

Además siempre será más agradable si es un momento que compartes con un familiar o un amigo.

 

6. Eliminar las resistencias:

Esto quiere decir básicamente que hagamos la actividad física lo más accesible posible.

Idealmente debería ser cerca de casa o en casa. Requiriendo poco transporte para llegar.

Y también que necesite poco material con un bajo coste dependiendo de nuestra situación económica.

Podemos ponernos como actividad física diaria la equitación, pero de poco servirá si no somos capaces de ir todos los días por distancia o dinero.

 

7. Comprométete contigo mismo:

En lugar de utilizar la tiranía o la disciplina mal entendida para mantenernos constantes con la actividad física, lo que es más eficaz es tener un compromiso con nosotros mismos.

Sabiendo que el momento de realizar la actividad física es un momento de autocuidado que nos dedicamos a nosotros mismos y recordando ese “para qué” inicial.

 

En definitiva, realizar actividad física no debería ser otra obligación más. Algo que “tengo que” hacer porque me lo ha dicho el médico o un familiar.

La actividad física tiene el potencial de ser algo que nos une a nuestros seres queridos, algo que nos apetece hacer cada día y que en resumidas cuentas disfrutamos completamente.

 

Los profesionales sanitarios tenemos que dejar de hacer la actividad física aburrida y repetitiva.

Fomentando cualquier tipo de actividad física sin meter miedo a las personas.