Cómo dejé de tener migraña

Tuve migraña y dolor de cabeza desde que tengo uso de razón.

A día de hoy no tengo y quiero compartir el proceso que seguí para conseguirlo.

Cómo empecé:

Lo primero es entender que la migraña NO es genética.

No estás destinado a tener migraña y hay muchas cosas que nos predisponen a padecerla y a que se perpetúen en el tiempo.

Lo que sé es que no es casualidad que tengamos migraña.

Yo, como todo el mundo que tiene migraña, empecé a identificar los desencadenantes y mi vida se fue haciendo cada vez más pequeña hasta que la migraña abarcaba todo.

La realidad es que yo era un niño con poco amor propio, perfeccionista, autoexigente, y que además sacrificaba sus necesidades para satisfacer las de los demás.

Esto lo que hace es que vivas estresado constantemente, aumenta los recursos defensivos hasta que se expresa a través de síntomas físicos como la migraña.

Cuando digo que la migraña es una entidad bio-psico-social, lo que quiero decir es que existen factores biológicos como:

- Falta de sueño

- Falta de actividad física

- Nutrición deficiente

- Falta de hidratación

- Exceso de radiación

Psicológicos como:

- Autoexigencia

- Autosacrificio

- Autocrítica

- Bajo amor propio

Y sociales como:

- Entorno hostil

- Entorno con poco apoyo

Y que estos factores PREDISPONEN y PERPETÚAN al organismo en estado de alerta. Lo cual hace mucho más probable que tengamos migraña.

Cómo me curé:

Vivir con migraña es horrible.

Todo gira alrededor de ella y te roba de experiencias y momentos que quieres disfrutar y no puedes.

Pero el propio miedo a la migraña es uno de los mayores perpetuadores de la misma.

Fue entonces cuando con 22 años de edad encontré los libros de Arturo Goicoechea y me empapé de ellos.

Estaba obsesionado por solucionar este problema que tanto daño me estaba haciendo.

Entendí que la migraña no es más que una falsa alarma, que lo que hay que hacer es exponerse a los desencadenantes, dejando estar el dolor sin tratar de controlarlo para convencer a nuestro organismo de que no hay peligro. Y entonces tuve la primera experiencia en la cual el dolor se fue sin yo hacer nada y sin un fármaco de por medio.

Desde ese momento tiré por la borda todos los desencadenantes y simplemente empecé a volver a la vida. Haciendo ejercicio, tomando cervezas, yendo a eventos sociales y en definitiva todo lo que me apeteciese.

Paralelamente, fui abordando los factores psicológicos que en mi caso eran muy relevantes.

Empecé a priorizarme, atender mis necesidades, aprendí a decir que no y esto tuvo como consecuencia que gané en confianza y en disfrute en mi vida.

Lo cual estoy seguro que jugó un papel clave en que yo me haya recuperado del todo a día de hoy.

Entonces por recapitular, yo me dejé de tener migrañas porque creo entender la fisiopatología de la misma. Y tú puedes hacer lo mismo:

- Entender la migraña como una falsa alarma

- Exposición gradual a los desencadenantes

- Abordar los factores biopsicosociales que pueden estar jugando un papel relevante

Soy consciente de que ya se dice en consulta que el “manejo del estrés” puede ayudar a la migraña. O en otros sitios se dice evitar el estrés (que no sé como).

Pero yo no estoy hablando de ninguna de esas dos cosas.

Yo hablo de cambiar de forma profunda la relación que tenemos con nosotros mismos y con el entorno.

De cambiar como personas.

Al mismo tiempo que nos exponemos a todos los desencadenantes con la convicción de que no son peligrosos para nuestro organismo.

Espero que a alguien le haya ayudado mi historia.

Y si has resonado con ella y crees que puedo ayudarte, escríbeme sin compromiso.

¡Un saludo a todos y a todas!