La importancia de entender la alexitimia.

(cuando no existen palabras para expresarnos)

La alexitimia se define como aquella incapacidad para reconocer las propias emociones y expresarlas. Especialmente de manera verbal.

Es un concepto muy importante porque lo cierto es que todas las personas que vemos en consulta ya sea con dolor crónico, mareos, fatiga, u otras muchas enfermedades y síntomas presentan alexitimia en mayor o menor grado. El cuerpo expresándose a través de otras vías ya que no podemos darle voz a aquello que sentimos.

Vamos con ello.

 

¿Cómo se ve la alexitimia?

Principalmente podemos identificar a una persona alexitímica cuando su lenguaje emocional es plano y carente de emoción. Tanto en el lenguaje verbal y el no verbal.

El tono suele ser plano, con baja expresividad de la cara incluso hablando de situaciones con alta carga emocional.

Son personas que tienden a intelectualizar o racionalizar las emociones. Haciendo uso a veces del sarcasmo para reducir la alta carga emocional que debería tener.

Finalmente puede ser que sean personas que digan que se sienten “mal” o “raros” pero no saben ponerle nombre a esa emoción en concreto o siquiera entender el motivo de esa emoción.

Quiero dejar claro que esto no es una cualidad fija en nosotros, si no que es algo que aprendemos normalmente en la infancia pero que podemos desarrollar a cualquier edad debido la gran plasticidad de nuestro cerebro.

¿Cómo empezar a reducirla?

Siempre recomiendo buscar ayuda profesional pero además hay ciertas cosas que podemos tratar de hacer por nuestra cuenta para reducir esa alexitimia.

En primer lugar eliminar la culpa y la vergüenza respecto a ello ya que no depende de nosotros aunque ahora podamos ponerle solución.

El siguiente paso sería prestar atención a nuestras sensaciones corporales en lugar de tratar de huir de ellas, puede ser presión en el pecho, ritmo cardíaco acelerado etc…

Luego podemos tratar de ponerle nombre a esa emoción de forma consciente, aquí resulta muy útil la rueda de las emociones. En ella tenemos las diferentes emociones desglosadas en todas sus diferentes variantes. Esto ayuda a aumentar la granuralidad emocional y a su vez ayuda a regularnos antes ya que tomaremos una acción en concreto.

Finalmente para regular esa emoción podemos ver qué necesidad tenemos sin cubrir y podemos tomar diferentes acciones para saciar dicha necesidad.

 

Cabe decir que todas las emociones que sentimos no son por casualidad. Se activan de forma automática antes de que sepamos incluso lo que está pasando.

Por eso aprender a entendernos es tan importante. A muchas personas les enseñaron que sus emociones eran peligrosas y no les ayudaron a entenderlas o regularlas. Por eso la mayoría de personas las ignora, siguiendo adelante a pesar de cómo se sientan o las tapa con estimulación externa porque es demasiado desagradable y abrumador para enfrentarlo.

 

Por mucho que nos empeñemos no existen las personas más “racionales”. Siguen siendo seres emocionales. Simplemente utilizan la razón para evitar conectar con la emocionalidad o para justificarla de alguna manera pero evitando sentir lo que realmente les ocurre.

Sin embargo las emociones viven en el cuerpo, incluso cuando no queremos mirarlas.

 

Un fuerte abrazo y feliz sábado.