Los 5 mejores libros para aprender sobre dolor persistente.

El dolor crónico es un gran desconocido de nuestra sociedad.

A pesar de todos los avances tecnológicos su prevalencia es cada vez mayor.

Quizás sea porque no lo entendemos del todo.

Aquí te dejo los mejores libros si quieres entender el dolor persistente, seas paciente o profesional:

1.“Migraña: Una pesadilla cerebral” de Arturo Goicoechea

En este libro Arturo nos abre un mundo de posibilidades, desmarcándose de la línea más ortodoxa de la neurología en la que estamos destinados a padecer migraña.

Nos introduce el concepto de la migraña como un error evaluativo aprendido por nuestro organismo y que es posible revertir. Además de muchos otros conceptos de neurobiología.

La respuesta para la cura de la migraña no estará en los genes o en los biomarcadores que encontramos en el cerebro.

Está en el aprendizaje, las creencias y los bucles de retroalimentación positiva que mantienen a nuestro organismo en un estado perpetuo de alerta protección.

2.“Joder como duele” de Álvaro Pinteño

Mi tocayo tiene un don para la dialéctica y para explicar conceptos complejos e ideas abstractas de una manera amena a la par que profunda.

Su libro no te dejará indiferente y te ayudará a profundizar en el conocimiento del dolor persistente.

Combina la evidencia científica, las experiencias personales y otras disciplinas para acercar el conocimiento del dolor a la población general y profesionales.

3.“Explicando el dolor” de David Butler y Lorimer Moseley

La biblia del dolor crónico por antonomasia. Este libro, a pesar de ser más antiguo sigue estando completamente actualizado.

Explica conceptos de neurobiología como la nocicepción y la diferencia que tiene con el daño. Además de romper con mitos sobre las causas más típicamente asociadas al dolor como la artrosis, hernias o escoliosis. Todo acompañado de ilustraciones muy reveladoras y llenas de creatividad.

Un libro imprescindible si estás empezando a entender el dolor crónico.

4.“Cuando el cuerpo dice no” de Gabor Maté.

Este libro no explica el dolor de forma directa, pero me parece muy revelador para entender los factores de riesgo que tiene el dolor crónico o básicamente el precio de tener un organismo en alerta mantenido en el tiempo.

Ahonda en las experiencias traumáticas de la infancia y cómo éstas determinan cómo nos relacionamos con nosotros mismos y con el mundo. Lo cual puede facilitar que vivamos con un estrés persistente que tarde o temprano puede producir alteraciones en nuestra salud.

Gabor Maté nos ayuda a entender como “lo psicológico” puede acabar teniendo repercusiones en nuestro cuerpo.

5.“El dolor crónico no es para siempre” de Arturo Goicoechea.

Nuevamente Arturo, en su último libro nos trae una ampliación de conceptos de neurobiología para combatir la epidemia de dolor crónico que tenemos en nuestra sociedad.

Utilizando los conceptos que aplican a la migraña y añadiendo algunos nuevos para poder referirse al dolor musculoesquelético.

Es un libro que no solo te da conocimiento si no también esperanza. Ya que nos invita a no conformarnos con el diagnóstico de “crónico”.

Ya lo decía Marie Curie, en esta vida: “No hay nada que temer si no que comprender”

Si no estamos teniendo buenos resultados con fármacos, terapias, máquinas e intervenciones para curar el dolor crónico, seguramente tengamos que mirar hacia otras fuentes de conocimiento y otros modelos que nos den mejores resultados.

Yo personalmente creo que la solución vendrá de un pensamiento sistémico sobre el dolor, teniendo en cuenta los factores biológicos, psicológicos y sociales que influyen en nuestros organismos, además de los bucles, creencias y aprendizajes que perpetúan la aparición del dolor.

Es imposible entender el dolor si nos quedamos solo con las moléculas, los músculos o las articulaciones.

Entender el dolor implica mirar a la persona, sus creencias, preocupaciones y miedos, además de todo lo que la rodea y como ésta interactúa con el entorno.

Mientras tanto, a todos los que tengáis dolor os mando un mensaje de esperanza.

El dolor no tiene que ser para siempre. Y mientras, hagamos la vida más grande que el dolor.

Un saludo.

Si tienes dolor persistente (migrañas o dolor muscular/articular) y crees que puedo ayudarte me encantaría leer tu historia.

Puedes contactarme en mis redes sociales o respondiendo a este correo.