Por qué nos emocionan las canciones.

(la función social del arte)

Este verano estoy teniendo oportunidad de reflexionar acerca de cuestiones que normalmente no tengo el tiempo ni la oportunidad para hacerlo.

Algo que siempre me he preguntado es el por qué nos emocionan ciertas cosas. ¿Por qué le emocionan a algunas personas y a otras no? ¿Qué hay en el arte o la música para que nos provoque emoción? Y por supuesto ¿Cuál es la utilidad de toda esta emocionalidad en un mundo que prima la productividad y la acción?

Vamos a ello.

 

¿Por qué nos emocionamos?

Personalmente y a lo largo de mi vida me han emocionado diferentes películas, canciones u obras de arte. Al principio no era capaz de comprender por qué, simplemente te transmite algo, te llega, te conmueve.

Lógicamente no puede ser casual y es que en todo lo que tenga que ver con el arte o la emoción existe muchísima subjetividad. Lo vemos ahora con las diferentes formas de arte contemporáneo por ejemplo.

También existe mucho “postureo” con el arte y muchas personas afirman que algo les emociona cuando realmente no es así. Pero el hecho es que si algo nos emociona, ya sea una escultura, un cuadro, una canción, o la escena de una película, lo más seguro es que toque partes de nosotros que forman parte de nuestra experiencia como seres humanos.

Por ejemplo, si estoy pasando por una ruptura amorosa escuchar canciones de desamor seguramente me hagan llorar. Pero si nunca he tenido una relación ni he amado seguramente no conecte con algo dentro de mi ser de una manera tan profunda.

Lo hermoso específicamente de las canciones que tienen letra es que no solo conectan con nuestra emocionalidad si no que le ponen palabras a aquello que sentimos y que a veces nos cuesta expresar. Es una forma sin duda de validación emocional, lo cual nos emociona aún más por el hecho de ver que otras personas tienen los mismos problemas y las “mismas” emociones que nosotros.

Sin duda hay experiencias muy comunes en la vida de un ser humano: El desamor, la añoranza de un ser querido, el cariño profundo por un familiar, el enfado con la sociedad y las injusticias… y es que lo que hacen los artistas es transmitirnos su emocionalidad y nos validan a través de infinitas maneras. Ya sea danza, arte, música, escultura o cualquier modalidad.

La función social del arte y la música:

Entonces cuando nos hacemos la pregunta de por qué dedicamos tanto tiempo y recursos a algo que en la sociedad de la productividad puede parecer “inútil” yo siempre saco a colación las pinturas rupestres, o las marcas en la piel de las personas en tribus indígenas, o los abalorios y adornos que usaban para vestirse en el antiguo Egipto.

El arte ha estado con nosotros durante toda nuestra historia y eso es porque lo necesitamos. Lo necesitamos para expresarnos, para validar lo que sentimos y para compartirlo con los demás miembros de nuestra tribu.

El valor que puede aportarnos una obra de arte o una canción es difícil de calcular. Pero estoy seguro que mientras exista la especie humana el arte será una parte central en nuestra cultura y en nuestro ser.

 

Un fuerte abrazo y feliz sábado.